Los satélites Proba-3 de Europa logran un éxito histórico en vuelo en formación

La Agencia Espacial Europea (ESA) ha anunciado que su misión Proba-3 ha alcanzado un hito histórico al completar con éxito una prueba de vuelo en formación ultrapreciso en órbita. Según un comunicado emitido el 8 de mayo, los dos satélites de la misión, denominados Occulter y Coronagraph, volaron en perfecta sincronía a una distancia de 150 metros (492 pies) entre sí, con una precisión de milímetros.

Este logro marca la primera vez que un par de naves espaciales demuestra un vuelo en formación tan preciso, un avance con implicaciones significativas tanto para la ciencia como para futuras misiones espaciales. Los satélites Proba-3 mantuvieron su posición relativa de manera autónoma durante varias horas, gracias a una combinación de sensores avanzados, incluyendo el instrumento láser Fine Lateral and Longitudinal Sensor (FLLS), un sensor de posición de sombra y sistemas basados en cámaras, junto con software a bordo y pequeños propulsores de gas frío.

La misión Proba-3 utilizará esta capacidad para simular y estudiar eclipses solares totales de manera artificial, abriendo nuevas posibilidades para la investigación científica. La ESA destaca que esta tecnología no solo impulsará el estudio del Sol, sino que también sentará las bases para misiones espaciales futuras que requieran un control preciso de satélites. Este éxito representa un paso crucial en la exploración espacial, y se espera que los próximos experimentos de la misión generen un gran interés en la comunidad científica.